jueves, 25 de diciembre de 2014

El llanto de Machado




Pensabas que no había más camino
porque no viste florecer su huella;
sólo llegar querías hasta ella,
y soñabas subir al Alto Espino.

Lloraste por su amor bajo los pinos;
anhelabas morir junto a su losa;
más Leonor, desde el cielo en que reposa,
tu pena torna en versos cristalinos.

Y en días de ventisca o de aguaceros,
lo mismo que en las tardes de calina,
o cuando el vendaval las nubes mece…

Su voz sigue sonando en los oteros;
y el llanto en tu poema, peregrina,
cantando una nostalgia que estremece.

            ---oooOOOooo---

                                         08 -12-2011