La aurora, madrugando, se
impacienta;
la primavera a sonreír se
afana;
desnúdase la flor, fuerte y
galana:
es la vida en sus brotes,
que fermenta.
Ágiles soles, claros sin
tormenta,
se ve la luz de Octubre tan
lejana,
que aún se cierran los ojos
al mañana
salpicado de bruma
cenicienta.
* *
*
Y Otoño es hoy; es tiempo
de cosechas;
ponerse en orden y allanar
camino
acompañando al sol hacia
Poniente…
Y si cierra tu vida
antiguas brechas
y acepta sin rencores su
destino,
mirar podrás la Eternidad
de frente.
---ooOOOoo---
3-10-2006